¿Está usted en buena forma financiera? ¿Se considera en estado financiero óptimo? ¿O necesita un plan de ejercicios financieros para mejorar esas partes que dejan algo que desear? De la misma manera que un programa de ejercicio regular puede ofrecer beneficios generales para la salud, la atención regular de sus finanzas le recompensará con una buena salud financiera general.
Ten fe en que se cubran todas tus necesidades.
Ten fe en que se solucionen todos tus problemas, ten fe en que habrá abundancia en todos los niveles.
Eileen Candy
George Clason resumía esta idea en su libro “El hombre más rico de Babilonia” con las siguientes palabras: “Si desea comenzar a acumular su propia fortuna, recuerde que una parte de todo lo que gana es suya para ahorrarla. Por cada 10 monedas que coloque dentro de su bolsa, fruto de su trabajo, gaste solamente nueve.” A esto es a lo que me refiero cuando hablo de pagarnos nosotros mismos primero.
Ahorre e invierta el 10% de sus ingresos a lo largo de su vida de trabajo. Cada vez que reciba su cheque a fin de mes, inmediatamente tome de ahí un 10% y guárdelo en una cuenta especial para su acumulación de riqueza. Cualquier persona, incluso aquellas que devengan un salario mínimo, si empiezan temprano, pueden ahorrar y amasar grandes fortunas si desarrollan la disciplina de ahorrar e invertir su dinero de manera inteligente.
Una vez se dijo que: “Si usted no puede ahorrar dinero, entonces las semillas del éxito financiero definitivamente no están dentro de usted.” Desarrollar el hábito a lo largo de su vida de ahorrar e invertir dinero, no es fácil. Requiere una determinación y una voluntad increíble. Debe fijarlo como un objetivo, escribirlo, hacer un plan y trabajar en él, todo el tiempo. Pero una vez que adquiere este hábito, se vuelve automático y su éxito financiero está asegurado.
Practique la frugalidad en todas las cosas. Sea muy cuidadoso con cada centavo. Cuestiónese cada gasto. Posponga o difiera cada decisión de compra importante, una semana, o un mes. Mientras más posponga la decisión de compra, mejor será la decisión y obtendrá un mejor precio.
Una de las razones por las cuales las personas se retiran pobres es porque gastan más de lo que deben, son impulsivas al momento de comprar. Ven algo y lo compran sin pensar mucho en si lo hacen o no. Se vuelven víctimas de lo que se conoce como “La ley de Parkinson”. Esta ley dice que: “Los gastos siempre tenderán a subir hasta igualar los ingresos.” Sin importar cuanto gane, si gasta esa cantidad o más, lo único que estará acumulando serán deudas.
Si no puede ahorrar el 10% de su salario, comience ahorrando 1%. Guárdelo al principio de cada mes, incluso antes de empezar a pagar deudas. Viva con el otro 99% de su sueldo. Cuando se sienta cómodo con esto, suba los ahorros al 2% de su sueldo, después al 3%, hasta llegar al 10%.
Al poco tiempo descubrirá que estará ahorrando un 10% de sus ingresos y viviendo cómodamente con el resto. Al mismo tiempo, su cuenta de ahorros e inversiones empezará a crecer. Se volverá más cuidadoso con sus gastos y empezará a pagar sus deudas. A lo largo de uno o dos años, toda su vida financiera estará bajo control y usted estará en camino de construir su propia fortuna. Este proceso ha funcionado para todos los que lo han tratado y ahora puede funcionar para usted.
Pregúntese entonces:
- ¿Cuento con un presupuesto que me permita controlar mis finanzas?
- ¿Caigo fácilmente en el instinto de comprar, sin diferir mis decisiones al respecto?
- ¿Ahorro al menos un 1 ó un 2% de mis ingresos mensuales?
- ¿Cuáles son las actividades en las que malgasto mi dinero?